Este año, animados por la invitación del Papa Francisco y aprovechando el material “Oh, Madre tierra” de Radio Santa María trabajamos el tema del cuidado del medio ambiente bajo el lema “La tierra es nuestra casa común; la cuido yo, la cuidas tú”. En esta ocasión participaron 28 instituciones, escuelas y parroquias de distintas zonas del país. Entre ellas se encontraban: 4 de las parroquias de la Compañía y 2 de las escuelas de Fe y Alegría. En total, participaron unos 2,185 niños y guías. Además, tuvimos la alegría de recibir a más de 45 voluntarios entre novicios, jóvenes de FIJA, candidatos a la Compañía y médicos voluntarios de la PUCMM, a los cuales se suma el equipo de planta que estuvo las 10 semanas que duraron los campamentos. Gracias a Dios todo se desarrolló sin ningún inconveniente ni de salud ni de donaciones de alimentos.
Este año pudimos comprobar que el cambio en la modalidad del taller de guías rindió muchos frutos. Este año realizamos 3 campamentos de guías en los que nos enfocamos en dar herramientas que ayudaran no sólo en el trabajo durante el verano sino también en las parroquias. Dado que los guías tenían todo el material que se utilizaría previo al verano las parroquias, escuelas e instituciones vinieron muy bien preparadas para el campamento lo que facilitó el trabajo del equipo de planta.
Una novedad de este año fue la inauguración de la capilla al aire libre donada por la familia Bermúdez. Otro elemento que nos causó mucha alegría fue la participación de más sacerdotes con sus grupos, vinieron: 1 salesiano, 1 dominico, 1 diocesano y 2 jesuitas.
Como es ya de su conocimiento, el Centro Bellarmino, acompañado por el P. Prudencio Piña, asumirá la dirección del campamento. Este paso se hará efectivo a partir del martes 30 de agosto del año en curso. Estoy seguro que con Prudencio y su equipo el campamento se consolidará en términos pedagógicos y afianzará su institucionalización, lo cual es una gran noticia para todos nosotros. Este paso fue anunciado por el P. Provincial el pasado 21 de agosto en la Eucaristía de clausura de los campamentos.
Por otro lado, el Campamento P. Dubert y la Asociación Dominicana de Voluntariado Hospitalario se asociaron para presentar el pasado viernes 26 de agosto en el Gran Teatro del Cibao el concierto “Mis 15 años, música por la niñez” con la destacada violinista dominicana Aisha Syed Castro. Con este concierto buscábamos no sólo captar fondos para el campamento sino también promocionarlo para futuros donantes. Tuvimos una muy buena asistencia de público y el apoyo de muchas empresas de la zona, además del apoyo de todo el equipo del Gran Teatro del Cibao. Aisha y su familia se ofrecieron generosamente para ofrecernos este concierto que no tuvo desperdicios. Es impresionante el trabajo y la entrega del Comité de Apoyo de Campamento en todas las actividades, un grupo de laicos y laicas que han asumido el campamento como propio y han sido vitales para el funcionamiento del mismo.
Debo agradecer a todos ustedes por el apoyo y la cercanía en los dos años que estuve en los Campamentos P. Dubert. Siempre es una alegría poder aprender cosas nuevas y eso es lo que tuve que hacer al asumir los campamentos. Gracias a Dios y a los jesuitas que me precedieron en esta responsabilidad (Dubert, Chepe y Roberto), que supieron conformar y animar el equipo humano que da vida a estos campamentos y las sólidas relaciones que construyeron me ayudaron a caminar con esta obra. Aprovecho para pedirles disculpas porque sé que en muchas ocasiones no estuve a la altura de lo que esta obra ameritaba durante mi tiempo en ella.
Saben que seguiré con el trabajo en la Pastoral Juvenil Ignaciana desde donde continuaré a sus órdenes. Un abrazo.